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En el entorno actual, poner a las personas en el centro es crucial si queremos mantener el talento en la empresa y seguir atrayendo nuevos talentos. Aunque el salario sigue siendo un elemento importante, la cultura de empresa es uno de los factores clave a la hora de elegir un puesto de trabajo. A menudo oímos hablar de cultura corporativa o de empresa, pero ¿qué podemos hacer para crearla en nuestra empresa, cómo es y cuáles son los pasos?
Estamos en 2023. La guerra por el talento sigue en pie. Olvídate del dinero. La nueva generación de empleados busca algo más que eso. Quieren trabajar para una empresa en la que crean de verdad. Una empresa que comparta las mismas creencias y valores que ellos. Una empresa que les haga sentir que forman parte de algo más grande, como una familia. El cambio al que nos enfrentamos durante la pandemia llevó a la gente a revisar sus hábitos, pero sobre todo sus prioridades: la conciliación de la vida laboral y familiar se convirtió en uno de los principales requisitos a la hora de elegir trabajo.
Esto significa cuidar a las personas y garantizar que puedan sentirse parte integral de una misma familia e implicadas activamente en la consecución de los objetivos de la empresa: en este sentido, el acceso a vías de desarrollo profesional y personal desempeña un papel clave.
¿Qué podemos hacer para crear una cultura de empresa positiva y compartida? En este artículo hablaremos de ello:
Lo primero es lo primero: ¿qué es exactamente la cultura de empresa? ¿Es la visión y la misión de tu empresa? ¿Son sus balances? ¿O el manual del empleado? No. ¡Es más que eso! La cultura de su empresa no sólo existe sobre el papel. Se refleja en lo que haces, en lo que dices, en cómo te comportas, en cómo tratas a tu equipo, a tus productos/servicios, a tus clientes y, por supuesto, a ti mismo.
¿Por qué es importante, y más hoy en día?
Como hemos visto en la introducción, las personas se preocupan cada vez más por su propio bienestar, por lo que, incluso dentro de una empresa, buscan entornos que garanticen el equilibrio entre la vida laboral y personal y pongan el bienestar de las personas en el centro, potenciando sus características y singularidad.
Por lo tanto, una cultura de empresa positiva y compartida es la columna vertebral de un equipo feliz, y un equipo feliz contribuye inevitablemente al éxito de la empresa. Si los miembros de tu equipo se sienten valorados e implicados en la consecución de objetivos, estarán más motivados y animados a contribuir al éxito del equipo y de la empresa, serán más productivos y creativos.
Los empleados que se sienten apreciados en el trabajo tienden a estar más comprometidos y, sobre todo, más motivados para seguir en tu empresa. Y no solo eso, se convertirán en auténticos embajadores de marca ante su propio círculo de conocidos y clientes.
Construir una cultura corporativa de este tipo no siempre es fácil: te dejamos nuestros 8 consejos útiles para hacerlo.
Si a tu empresa, por ejemplo, le apasiona crear un mundo más verde. Entonces puedes recompensar a tu equipo por ir al trabajo en bicicleta. O si uno de los valores de tu organización es construir comunidades más fuertes. Entonces, ¿por qué no darle a tu equipo una semana al año de tiempo libre remunerado para ayudar a las comunidades locales?
Definir tus valores es sólo la punta del iceberg. Lo que realmente necesitas es centrarte en vivirlos cada día. ¿Tienes curiosidad por saber cuáles son los valores fundamentales de MobieTrain? Puedes conocer más sobre nosotros aquí
Después de haber definido los valores de empresa es fundamental definir los objetivos comunes del equipo: como ya hemos dicho, hoy en día la gente necesita algo más que un sueldo para motivarse.
Asegúrate de que trabajas en equipo para conseguir un objetivo claro. Pueden ser objetivos semanales, mensuales o anuales. Por ejemplo: ganar X clientes más este año, vender X productos antes de que acabe la semana, ampliar el negocio a los países Y y Z en los próximos 5 años, duplicar las críticas positivas de los clientes en un mes
Si las personas tienen objetivos claros y compartidos, sabrán exactamente cómo actuar para alcanzarlos.
Si alcanzas tus objetivos como equipo, es muy importante celebrar ese éxito invitando a tu equipo a cenar o a tomar algo, por ejemplo. Crear un entorno positivo también significa expresar tu gratitud de vez en cuando. Puede ser con palabras o con un pequeño regalo de vez en cuando: durante las vacaciones, justo antes de las vacaciones de verano, en Semana Santa y Navidades, etc.
Centrarse en estos momentos ayuda a crear un entorno positivo en el que las personas se sienten valoradas y motivadas para hacerlo bien.
A veces, incluso los pequeños gestos pueden ayudar a las personas a recuperar la motivación, y esto es posible con recompensas o pequeños premios que también pueden compartirse en las redes sociales: de esta forma no solo trabajará sus talentos, sino que también atraerá a otros nuevos.
También hemos hablado de ello rápidamente en los párrafos anteriores: la cultura corporativa es importante, pero para que sea eficaz debe compartirse dentro del equipo.
Formar un equipo capaz de trabajar conjuntamente es uno de los retos más difíciles, pero es un factor crítico de éxito. Las personas que se sienten parte de un equipo están más motivadas y, en consecuencia, son más productivas, pero ¿cómo?
Organiza momentos de tembuilding como una excursión a un parque temático o un viaje corto al extranjero, y otras oportunidades divertidas para estrechar lazos, como una copa después del trabajo, una noche de juegos, un concurso de preguntas y respuestas, el intercambio de regalos secretos de Navidad durante las vacaciones, ¡lo que se te ocurra!
Si quieres alimentar el sentimiento de unidad durante todo el proceso, asegúrate de que durante estos momentos también haya ropa a juego, como una sudadera de la marca de tu empresa.
Todas estas son iniciativas que pueden ayudarte a crear un equipo unido.
Organizar un evento de team building puede resultar caro, somos conscientes de ello. Lo bueno es que para consolidar el equipo no es necesario organizar grandes eventos, basta con empezar con pequeños momentos de convivencia como las pausas para comer.
La comida es la base de muchas culturas. No es diferente de la cultura de tu empresa. Una comida compartida une a las personas. La comida nos une. Seguro que pueden pedir una pizza juntos, pero ¿por qué no probar algo diferente para variar? Por ejemplo, que cada uno traiga un aperitivo casero para un picnic al aire libre.
Las oportunidades son múltiples y, créeme, después de una sola comida verás grandes cambios en tu equipo.
Las personas pueden tener diferentes necesidades a lo largo del día y no todo el mundo es productivo de la misma manera y a la misma hora. Algunas personas se sienten más productivas a primera hora de la mañana, otras por la tarde y otras por la noche.
Para satisfacer las necesidades de tus empleados y maximizar su productividad, puedes introducir el horario flexible. ¿Qué significa esto? Dar más autonomía a las personas y evaluar su rendimiento en función de los objetivos alcanzados y no tanto de las horas reales trabajadas.
Como diría Dolly Parton, "trabajar de 9 de la mañana a 6 de la tarde se está quedando obsoleto". La semana laboral estándar ya no puede garantizar la consecución de objetivos. Tener un horario flexible le permite a tu equipo ocuparse de su propio bienestar y gestionar un equilibrio saludable entre vida laboral y personal.
Por ejemplo, si tienen una cita con el médico o tienen que recoger a sus hijos del colegio, no hay problema. Pueden empezar un poco antes por la mañana para llegar a tiempo por la tarde.
¿Has escuchado hablar del aprendizaje continuo?
Debes saber que este concepto se refiere al aprendizaje continuo: en la vida, nunca se deja de aprender. Para garantizar el éxito de tu organización, tienes que invertir en la formación de tus empleados para que adquieran y actualicen constantemente sus competencias.
La formación también debe tener en cuenta los cambios que se están produciendo para ser eficaz, por lo que es crucial adoptar metodologías y tecnologías que fomenten una experiencia de aprendizaje envolvente y atractiva.
¿Cuál es la solución? El microlearning mobile-first podría ser la adecuada para ti: ayuda a tus empleados a mantenerse al día con contenidos breves, accesibles en cualquier momento y desde cualquier dispositivo. De este modo, pueden mantenerse al día con sólo 5 minutos de formación al día. Útil, ¿verdad?
Cuidar el bienestar de la empresa pasa inevitablemente por el bienestar de las personas: un equipo compuesto por personas felices, relajadas y sanas, emocional y físicamente, está sin duda más motivado y es más productivo.
Ayuda a tu equipo a estar en forma y saludable, física, emocional y mentalmente. Puedes, por ejemplo, ofrecer snacks saludables en la oficina, proporcionar escritorios ergonómicos, crear un club deportivo en el trabajo (para salir a correr o montar en bicicleta juntos después del trabajo).
¿Qué puedes hacer tú? Invita a tus empleados a cuidar de su propia salud, promueve comportamientos virtuosos en la empresa y utiliza horarios de trabajo flexibles para darles la oportunidad de gestionar su tiempo de forma óptima, lo que incluye hacer las pausas adecuadas.
Y no sólo eso, también puedes organizar reuniones y talleres con profesionales para ayudarles a aumentar su nivel de concienciación sobre temas como la gestión del estrés, la nutrición y la actividad física. ¿Difícil? No hay problema, siempre se puede empezar por las pequeñas cosas: no organizar reuniones durante la comida, no llamar al equipo fuera del horario laboral o durante las vacaciones, son acciones que pueden ayudar mucho.
Recuerda: Tu equipo es tu bien más preciado. Invertir en sus empleados es la decisión empresarial más inteligente que puede tomar. No importa lo que diga su balance, la inversión continuada en su equipo siempre dará sus frutos. Tráteles bien y tu empresa tendrá un gran éxito. Ésa es la clave.